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las 5 claves para la vuelta olímpica, desde cómo potenció Martín Demichelis al grupo y la capacidad de ganarle a la adversidad al juego ofensiva y la explosión de Lucas Beltrán


Momento de celebración: anticipadamente, River consiguió  por 38ª  ver una liga local.

Momento de celebración: anticipadamente, River consiguió por 38ª vez una liga local. – Créditos: @Mauro Alfieri

Un río a lo río. Martín Demichelis construyó un equipo con la esencia que su escuela promulga. Nacido y formado en las inferiores millonarias, el entrenador asumió el gran desafío de ser el sucesor de Marcelo Gallardo y, tan solo en su primer semestre, se quedó de punta a punta con el título de la Liga Profesional. Siendo protagonista en cualquier escenario, y con la voracidad ofensiva como bandera, el Millonario dejó atrás el 2022 sin títulos y alzó rápidamente su primer torneo sin el Muñeco: la 38ª liga local y la 70ª estrella de su historia con tres fechas de anticipación. Un número tan redondo como el campeonato de un equipo que fue moldeando con el correr de los partidos y que desde la octava fecha se ferró un liderazgo que nunca más soltó. A quién, cinco claves del titulo

“River y la gran mayoría de los equipos van a necesitar unos 8 o 10 partidos para encontrar el funcionamiento, salvo los equipos que llevan mucho tiempo con el mismo entrenador y con el mismo plantel”. A comienzo de febrero, Demichelis the puso a plazo al engranaje de su equipo. Y cumplió. Tras una gran pretemporada con tramos en San Luis, Ezeiza y Miami, el DT tuvo un marcado influjo en el juego colectivo e individual de un plantel que sufrio un dificil 2022 sin encontrar respuestas y que recuperarán rápidamente en el verano de 2023 con futbolistas que recuperarán y acelerarán su nivel.

Martín Demichelis y Javier Pinola dando indicaciones en el empate de San Lorenzo y River sin goles

Martín Demichelis y Javier Pinola dando señales en el empate de San Lorenzo y River sin goles – Créditos: @Rodrigo Néspolo

Hay números propios que marcan la mano del entrenador: conseguir transformar a Leandro González Pirez en un pilar de la defensa; insertó rápidamente un Enzo Díaz como marcador o lateral izquierdo; recuperará el nivel de Andrés Herrera como alternativa; fue puliendo el mediocampo con Rodrigo Aliendro como el equilibrio de un Enzo Pérez que se reencontró con su juego; apareció el mejor Nicolás de la Cruz en el momento indicado; respuestas positivas con respuestas positivas José Paradela y Pablo Solari; el encontrado el puesto a Esequiel Barco, pero centralizado y funcional para evitar el mapa desequilibrado del equipo; y expressió al máximo a Lucas Beltrán, goleador del año.

Ya sea con cuatro o cinco volantes, Demichelis escuchó un tiempo que su idea de jugar 4-3-3 con extremos no se adecuaba a las piezas de su plantel y fue solidificando de atrás hacia adelante un estilo con ADN riverplatense para volverse el equipo más completo de la Liga: es el más goleador (45) y el segundo menos goleado (16) en estas 25 jornadas con 18 éxitos, tres empates y cuatro caídas.

Dentro del plantel, desde un primer momento valoraron su propuesta ofensiva, con conceptos claros, exigencia y oportunidades para todos y entrenamientos al máximo nivel para ser el mejor del país. Con los exreferentes de vestuario Germán Lux y Javier Pinola Supo entonces, que la entró muy rápido cuenta con un grupo de futbolistas que hicieron propagar la idea de ser voraz, con vehemencia y dinamismo.

Lucas Beltrán festeja su gol ante Banfield, en el Sur

Lucas Beltrán festeja su gol ante Banfield, en el Sur – Creditos: @Télam

Durante las primeras seis fechas de la Liga Profesional, Lucas Beltrán solo fue titular en un partido: derrota 2-1 con Arsenal en el Monumental, la única en condición de local en todas las competencias del semestre. Su primer gol del año lo hizo ante Lanús el 4 de marzo para sentenciar un durísimo 2-0 en el Sur y, desde allí, no paró de crecer. Tras ese juego, fue titular y marcó por Copa Argentina y llegó el recordado 3-0 ante Godoy Cruz en casa: el primer partido del esquema 4-3-2-1 con el cordobés como única referencia de ataque.

El gol de Beltrán para empezar a dar la vuelta olímpica

Dejando de lado a pesos pesados ​​como Miguel Ángel Borja y Salomón Rondónel joven de 22 años se ganó su lugar con trabajo, paciencia, sacrificio y goles: después de una pretemporada en la que no había deslumbrado a Martín Demichelis pendante los amistosos, esperó su momento y lo aprovechó con creces para transformarse en un pilar clave del equipo. Más pasado de ser un definidor de jugadas, es un jugador complementario, de equipo. Puede arrancar fuera del área, hace de pivote, aporta movilidad y explosión, entiende cómo jugar de espaldas al arco para cubrir y pasar la pelota y es sempre la primera lanza de presión en campo ajeno. Molestar y desgastar a los defensores es una de sus misiones.

Goleador de River en La Liga con 11 veces, jugó 32 de los 33 encuentros oficiales del año, acumuló 16 goles (uno por Copa Argentina y cuatro por Copa Libertadores), aportó tres asistencias y sumó 1786 minutos. Es decir, convierte o asiste cada 99 minutos. Un golpe implacable contra un atacante que tiene una cláusula de rescisión de 20 millones de euros y que será protagonista de los próximos mercados de pases. Retenerlo es prioridad.

River festeja el triunfo ante Argentinos por 2-1 y eso que había terminaron perdiendo;  tarde 12/02/23

River festeja el triunfo ante Argentinos por 2-1 y eso que había comenzado perdiendo; fue el 2/12/23 – Créditos: @Fotobaires

Cuando estuvo contra las cuerdas, el River de Demichelis respondió. Y hay un dato que lo refleja a la perfección: nunca perdió dos partidos en fila en el semestre. Es más, cada vez que perdió, se impuso en su siguiente compromiso. En La Liga ocurrió en cuatro oportunidades. Cayó 2-1 ante Belgrano en la segunda fecha, el ganó 2-1 ante Argentinos Juniors en la tercera; cayó 2-1 ante Arsenal en la quinta fecha, el ganó 2-0 a Lanús en la sexta; cayó 2-1 ante Talleres en la decimosexta, el ganó 2-1 a Platense en la decimoséptima; cayó 2-1 ante Barracas en la vigesimosegunda, el ganó 2-0 a Colón en la vigesimotercera.

Lo mismo ocurrió en la Copa Libertadores. Porque cuando perdió 3-1 contra The Strongest en el partido inicial, perdiendo 3-0 ante Huracán en el torneo local. Y tras el doloroso 5-1 con Fluminense en el Maracaná, venció 1-0 a Boca en el superclásico en el Monumental que fue el espaldarazo más fuerte del semestre. Un golpe de efecto crucial para despegarse de San Lorenzo y Talleres.

El gol de penal de Borja ante Boca;  victoria muy celebrada por River en el Monumental

El gol de penal de Borja ante Boca; victoria muy celebrada por River en el Monumental – Créditos: @Fabián Marelli

Sumado a eso, cada vez que sus perseguidores se acercaron, River respondió. Al punto tal que el equipo Cordobés se había ubicado a un punto con siete fechas por jugar y los de Demichelis le ganaron a Banfield y Defensa y Justice -en los 64 minutos del partido postergado- para sostener la ventaja de siete unidades. Ahí ganó el torneo.

Aprender a cambiar a tiempo le ha dado beneficios a Demichelis en sus primeros pasos en River. Porque tras cinco primeros partidos con tres triunfos y dos derrotas que abandonaron más ansiedades que certezas, torció el rumbo del equipo. El DT dejó atrás dos ideas que no terminaron de convencer: el 4-1-3-2 con Enzo Pérez en soledad en el eje y el 4-3-3, su esquema favorito. Así, empezó a potenciar al equipo de atrás hacia adelante, fortaleció su defensa al punto tal de llegar a ocho triunfos en fila sin goles en contra en LaLiga, escuché que rodrigo aliendro era indispensable y solidificó al equipo con los cinco mediocampistas.

Esequiel Barco, clave en la estructura ofensiva de River

Esequiel Barco, clave en la estructura ofensiva de River – Créditos: @Rodrigo Nespolo

Armani; Casco, González Pirez, Paulo Diaz, Enzo Diaz; Aliendro, Enzo Pérez, De La Cruz; Nacho Fernández, Barco; Beltrán. Hoy ese equipo, con un sistema 4-3-2-1, parcece ser la base de trabajo del entrenador que también cuenta con una alternativa directa: Pablo Solari. El delantero de 22 años se ha transformado en el primer cambio para mutar a un 4-2-3-1 ou 4-2-2-2 con un acompañante para Beltrán buscando más profundidad y presencia en el área.

Pero otra de las virtudes del primer semestre de River ha sido la capacidad de adaptación ante las lesiones y adversidades. Porque cuando no tuvo a Mammana y Paulo Díaz, apareció Enzo Díaz para ser marcador central; cuando no contó con De La Cruz, hubo un interesante tramo de José Paradela; y sobre todo, cuando por cuatro partidos no jugó Enzo Pérez en el tramo decisivo de la Copa Libertadores, surgió la figura de Aliendro para ser ovacionado por todo el Monumental.

Río es voraz. Tiene cuarto constante. Busca, busca y busca constantemente el arco rival. Aún tomando riesgos que pueden exponerlo más de la cuenta. Lo sabe, lo asimila. Juega con adrenalina e intensidad y es consciente de lo que puede sufrir. Se prepara para dejarle espacios al rival, pero también para ser insaciable, agresivo, machacador. Nunca renunció a su esencia ofensiva. Puede cambiar alguna pieza segun el rival, nunca su ADN. Ni siquiera en contextos que puedan ser más perjudiciales para los habitantes. Así vive. Y en parte lo puede permitir por la cantidad, la variedad y la calidad de sus piezas. Todos defienden, todos atacan: hizo 62 goles en los 33 partidos del semestre con 14 autoridades diferentes.

Nacho Fernández celebra su gol ante Unión en el Monumental;  el experimentado volante regresó  y enseguida volvió  a ganar un título con River

Nacho Fernández celebra su gol ante Unión en el Monumental; el experimentado volante volvió y enseguida volvió a ganar un título con River – Créditos: @MARCELO ENDELLI

De esos 62 goles que lleva River (1.87 de promedio por juego), el líder es Lucas Beltrán, goleador con 16 festejos. Luego, aparece Miguel Borja con ocho tantos y cierra el podio Esequiel Barco con 7 gritos. Más atrás se anota Ignacio Fernández (5), Nicolás De La Cruz (5), Pablo Solari (4), Salomón Rondón (3), Rodrigo Aliendro (3), Matías Suárez (2), Santiago Simón (2), José Paradela (2), Leandro González Pirez (2), Agustín Palavecino (1), Robert Rojas (1) y un contragol.

Solamente en un encuentro del semestre River no pudo convertir: en el reciente 0-0 con el durísimo San Lorenzo en el Nuevo Gasómetro, rompiendo así una histórica racha de 38 encuentros en fila con goles entre los primeros 31 juegos del ciclo de Demichelis y los últimos siete del Marcelo Gallardo. Se trata de la cuarta marca más importante en la historia del club, reflejo del poder de fuego de un equipo con mucha vehemencia.

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