El Obradoiro plantó cara al Barça pero cae en el Palau
Hay muchos temas sobre los equipos que juegan contra el Barça. Que si hay que hacer un partido excelente, que si el Barça no ha de tener el día, que si hay que frenar a Mirotic… Todos ciertos en parte, como también que para ganar a los culés hay que hacer unos grandes 40 minutos. Y Monbus Obradoiro jugó unos fantásticos 30, pero se deshizo en el último cuarto. Apretó el Barça, castigó a Mirotic y se cansó a un impotente Obradoiro. El montenegrino certificó la tercera victoria de la semana.
Saltó Monbus Obradoiro al parqué del Palau sin nada que perder y mucho que ganar, completamente desinhibido y consciente de que para ganar al Barça debía hacer un partido muy serio, sobre todo en fase ofensiva. Es habitual que el Barça deje tenga rivales conocidos en unas pocas cifras de anotación, especialmente en casa, lo que condena inevitablemente a la derrota. 19 puntos consiguieron los gallegos en los primeros 10 minutos, 19 también el Barça, en un primer cuarto muy igualado en el que cada uno jugó sus cartas. Calathes reconfirmó que ya es el de antes de la lesión, Birutis que es una bestia por dentro y Ellenson que tiene buena mano. Con malos porcentajes de tiro y sin opción desde el triple, los azulgranas cerraron bien el rebote defensivo para mantener el electrónico igualado.
Ninguno de los dos equipos consiguió atinar de tres, lo que mantuvo bajo el marcador y evitó que ninguno se despegara. El Barça recuperó sin embargo la delantera gracias a unos buenos minutos de Mirotic y un dominio casi absoluto del rebote, mientras que Birutis sufrió un particular calvario desde la línea de tiro libre. Obradoiro intentó perder más balones de los estrictamente forzados por el Barça, que además acertó de tres. pero una jugada de cinco puntos (a triple más falta de Kuric) enterrado la ventaja azulgrana antes del descanso (37-34).
Apretó el Barça en el tercer cuarto, como en tantas otras ocasiones, aumentando paso a paso la distancia en el marcador. Contribuyó decididamente a ello Davies, pero reaccionó Obradoiro. Leyeron bien el partido, penetraron los exteriores y solo abandonaron tiros liberados a los interiores del Barça. Llegaron perdidos por diez, pero la distancia se esfumó (50-47). Un último parcial favorable al Barça dejó el partido aún muy abierto, pero con una ligera ventaja azulgrana (57-50).
Con empate a 59 Moncho Fernández tuvo que sentarse a Birutis (4 faltas) mientras que Jasikevicius dio entrada a Mirotic. Un cambio en la cancha que se traduce inmediatamente al goleador (69-61) y que decide el partido. El lithuano fue duree todo el encuentro el gran baluarte ofensiva de los visitantes y, sin él jugando, difícilmente iban a ganar. Tampoco si el Barça acertaba de tres o si Mirotic se enchufaba (todavía más) y es exactamente lo que pasó. Kuric, Calathes, y el propio Mirotic anotaron desde el perímetro firmando un parcial que decidió el shock.