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Lombardía cierra el mejor ciclismo



Existe un cierto consenso en el mundo del ciclismo de que la campaña 2021 ha sido y sigue siendo la mejor de los últimos tiempos. Con razón. Tal vez en España la misma percepción no llega, al menos no al gran público, ya que ningún corredor autóctono ha conseguido colarse en la fiesta salvo unas sueltas pinceladas de Enric Mas y el eterno Alejandro Valverde. Mientras la selección nacional sigue esperando el surgimiento de la generación de los nacidos en el siglo XXI, este talentoso grupo que lidera Juan Ayuso, Solo queda pasar un buen rato en el escenario internacional. Gran parte de la culpa recae en este duelo que mide en múltiples áreas para Wout van Aert con Mathieu van der Poel. También a la inconformidad del arcoíris Julien Alaphilippe, siempre en busca de una buena porción del pastel. Y, por supuesto, a estas tres personalidades que se han hecho cargo de las tres grandes giras: Egan Bernal, resucitado en el Giro; Tadej Pogacar, invencible en el Visitar; y Primoz Roglic, el maestro de la temporada con 13 victorias, incluida su exposición a El regreso.

Este nuevo ciclo cierra las puertas del Torre de Lombardía, el Quinto Monumento, la última carrera de la Vuelta al mundo. Y en la misma línea que el resto del curso, a pesar de las fechas de finales de octubre, va precedido de una semana emocionante, durante la cual vimos Vincenzo Nibali conquistar el Tour de Sicilia; a Remco Evenepoel, ganar el Copa Bernocchi; Roglic, tan dominante como de costumbre en Milán-Turín; en Pogacar, en la lucha por este clásico y por el Tres Valles Varesinos … El espectáculo recorre todo el calendario, independientemente del tamaño de la carrera. Hoy es Lombardía, una gran reserva de caza. Con los mismos nombres ilustres en la lista de favoritos. Y con Valverde, tres veces segundo, con ganas de saborear un poco de español hasta entonces.

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