UFC: Por qu no nos gusta la UFC (a algunos)

Quiz seamos pocos. Seguramente no importemos: el negocio es el negocio y parece que est claro que hay una masa crtica suficiente para que esta actividad lo sea. Servidor de ustedes no es ms que portavoz de s mismo pero sabe, porque se lo han dicho y algunos en persona, que tambin hay gente a la que no le gusta la UFC. El ‘deporte’ y su concepto.
Que no te guste la UFC no quiere decir que ab

ogues por

prohibirla

. Que haya que

cancelarla

como se dice ahora. Si hay dos personas que quieren entrar en un recinto para

despanzurrarse

, porque van a ganar mucho

dinero

por ello, y otras personas estn dispuestos a pagar por

verlo

haciendo posible que, efectivamente, se cobre, nada hay que oponer. Simplemente se trata de sealar las razones por las cuales algunos vemos

ajeno

ese mundo.
En primer lugar, porque es dudoso que pueda calificarse como ‘

deporte

‘ -y s. S que mi medio, este mismo medio, ha hecho un gran

despliegue

con el famoso combate entre

Topuria

y

Volkanovski

-.

Espectculo

, s, y a las pruebas de su alcance mundial nos remitimos. Pero el deporte tiene unas normas, unos valores, un significado. Hay deportes de

combate

, hay deportes de contacto. Hay incluso deportes

violentos

. En el

boxeo

, quiz el deporte al que pueda la UFC -o artes marciales mixtas- compararse ha

muerto

gente, y aqu, pese a que su violencia explcita es muy superior, an no.
Pero esto no es un deporte como los dems.

Es otra cosa.

No voy a entrar en los valores que pueda tener. Ni en si es esttico o no. Ni en su organizacin

empresarial

. Para gustos, colores. Vamos a quedarnos en valores de

humanidad

-ya ven ustedes las cosas en que nos fijamos algunos-. Se ha ledo que esto es la

evolucin

del boxeo pero no es as: este tipo de lucha es, en realidad, la

involucin

del boxeo, la involucin de las artes marciales, por mucho que la modalidad naciera como una ‘competicn’ entre ellas. Las artes marciales tienen

tradicin

. El boxeo naci como peleas a puo limpio, sin lmite, como pretexto para que masas de personas apostaran, y de eso naci el deporte espectculo. Pero se fue humanizando. Perdiendo brutalidad intrnseca. Se le acab llamando, quiz con exageracin, el

‘noble arte’

. No perdi un pice de convocatoria popular. Es ms: se acab convirtiendo en uno de los

deportes y espectculos ms populares y rentables

del mundo. An lo es.
Pero siempre ‘falta algo’. Esa

brutalidad

perdida tambin era aprovechable. La muerte, la

sangre

, siempre tuvo atractivo. En el mundo actual los edificios ms grandes que se construyen son

estadios

. Tambin lo eran en el mundo

romano

, el que ha modelado el nuestro. Y sus estadios, que acabaron siendo

mayores

que los templos, se dedicaban sobre todo a esa lucha de

gladiadores

sobre la que revoloteaba la muerte. Incluso

el ‘pancracio’ griego,

olmpico y muy parecido a los actuales combates UFC, pareca poco.
Roma y los gladiadores se acabaron. No se acab, y bien lo sabemos, la

violencia

y el gusto por la

sangre

. Que hasta el siglo XX hubo ejecuciones pblicas muy concurridas. Pero siempre se entendi que la civilizacin consista en ir

arrinconando la violencia.

El boxeo, como decimos, se humaniz. Incluso la

tauromaquia

ha evolucionado desde aquellos festejos del siglo XVII sobre los que se escriba «los toros fueron razonables [buenos] y mataron a siete hombres. Hirieron muchos»…
El actual espectculo de las artes marciales mixtas se basa, y me lo pueden negar si quieren, en ese residuo de

violencia

que el boxeo reglament para

humanizarse

. La pasin por ellas abre un peligroso camino a que

vas similares se exploren en otros deportes

en busca del ‘espectculo’ y acaben brutalizndose y, dado que el deporte es fruto y espejo de la sociedad, no sera raro que se produjese un

‘efecto contagio’ generalizado:

ya estamos viendo como algo que no tendra que ser negativo en s mismo como las

redes sociales

se han visto conquistadas por la violencia verbal.
Que algunas personas queramos

evadirnos

de este mundo no es, sin embargo, peligroso para el mismo. No somos ni mejores ni peores. Quiz ms

blandengues

, eso s. Pero queda muchsimo pblico y lugares donde arraigue con fuerza, como la

Chechenia

de Kadirov. Y del mismo modo que los

gladiadores

romanos solan iniciar su carrera como esclavos o gente agobiada por la pobreza, en nuestro mundo no faltan favelas, bidonvilles, ranchitos, townships y slumdogs en los que crear

cantera

, del mismo modo que en la generacin de nuestros padres y abuelos abundaban los chavales que intentaban ser

toreros o boxeadores

para sacar de la miseria a sus familias. Que es legtimo. Lo triste es que sea esa su mejor alternativa.